El Coste del capital propio, o Cost of Equity (CoE) en inglès, es un concepto especialmente importante en finanzas. Además de la información que transmite, el Coste del capital propio desempeña un papel clave en la valoración de empresas y proyectos.
Para quienes deseen trabajar en fusiones y adquisiciones, capital riesgo o finanzas corporativas en general, el concepto de Coste del capital propio es esencial. Puede confiar en nosotros: ¡el Coste del capital propio es un indicador financiero que tendrá que calcular un día u otro!
Por eso es vital dominar todos sus aspectos. Para ello, el equipo de The Big Win ha elaborado un artículo completo y fácil de leer sobre el concepto de coste de los fondos propios. Gracias a este artículo, dispondrá de todos los conocimientos necesarios para dominar los entresijos del Coste del capital propio.

¿Qué es el Coste del capital propio?
El Coste del capital propio representa la tasa anual de rentabilidad esperada por los inversores en fondos propios de una empresa. En otras palabras, el coste de los fondos propios sólo indica la rentabilidad esperada por los proveedores de fondos propios y, por tanto, el coste de este capital para la empresa.
¿Cómo se calcula el Coste del capital propio?
El Coste del capital propio puede calcularse de dos formas distintas.
El primero, el más conocido y utilizado en el mundo de las finanzas, se basa en el Modelo de valoración de activos de capital (CAPM).
El segundo método consiste en utilizar el Modelo de Capitalización de Dividendos. En este capítulo se analizan en detalle estos dos métodos de cálculo.
Cálculo del coste del capital propio con el modelo de valoración de activos de capital (CAPM)
Según el Capital Asset Pricing Model, la fórmula del Coste del capital propio es la siguiente:
Coste del capital propio = Tipo sin riesgo + Beta del capital propio * Prima de riesgo
Dónde:
Prima de riesgo = Rentabilidad total del mercado – Tipo sin riesgo.
Como puede ver, la fórmula del Coste del capital propio tiene varios componentes que deben definirse:
El tasa libre de riesgo
El tipo sin riesgo es el tipo que una empresa puede esperar recibir de una inversión sin riesgo. Una inversión sin riesgo es aquella en la que la probabilidad de impago del prestatario es prácticamente nula. Por regla general, para obtener un tipo sin riesgo se utilizan los tipos de los bonos del Estado.
Si desea saber más sobre el concepto de tasa libre de riesgo, le hemos dedicado un artículo entero, que encontrará aquí.
Prima de riesgo
La prima de riesgo es el rendimiento esperado entre la renta variable tradicional (en este caso, las empresas ordinarias) y la deuda pública. Hay dos formas de calcular la prima de riesgo:
El método denominado «Ex-Post», que consiste en un análisis estadístico e histórico de los rendimientos obtenidos por las acciones de las empresas y los bonos del Estado.
El llamado método «Ex-Ante», cuyo objetivo es estimar los dividendos futuros de las acciones de las empresas y las ganancias futuras de los bonos del Estado.
Beta de la renta variable
La beta de la renta variable es un importante indicador financiero que se refiere a la volatilidad de una acción en relación con su mercado.
- Por ejemplo, un Equity Beta de 0,5 significa que la empresa es un 50% menos volátil que su mercado. Por consiguiente, si el mercado sube un 10%, la cotización de la empresa subirá un 5%. Por el contrario, si el mercado baja un 2%, la cotización de la empresa caerá un 1%.
- En cambio, una Beta de 1,5 significa que la empresa es un 50% más volátil que su mercado. Así, si el mercado sube un 10%, la cotización de la empresa subirá un 15%. Por el contrario, si el mercado cae un 2%, la cotización de la empresa bajará un 3%.
Para calcular el Equity Beta de un coste de capital propio, es necesario seguir los distintos pasos que se indican a continuación:
- El primer paso consiste en calcular todas las betas de renta variable de la cartera de una empresa;
- A continuación, hay que «desapalancar» las Betas de renta variable de esta misma cartera de empresas;
- A continuación, tenemos que determinar una mediana Equity Beta unlevered ;
- Por último, simplemente «levantamos» la mediana de la Beta Patrimonial No Apalancada calculada en el paso anterior para obtener la Beta Patrimonial específica de la empresa que nos interesa y que se utilizará en el Coste del capital propio.
Dónde:


Este método concreto tiene una finalidad muy específica. Reduce la influencia de la estructura de capital sobre Beta. Para comprender mejor el concepto de Beta, proponemos el siguiente análisis:
- Una Beta inferior a 1 califica a una acción de «defensiva», lo que significa que es menos sensible a las fluctuaciones del mercado.
- Una Beta superior a 1 calificará a una acción de «agresiva», lo que significa que será más sensible a las fluctuaciones del mercado.
Cálculo del Coste del capital propio con el modelo de capitalización de dividendos
Según el Modelo de Capitalización de Dividendos, la fórmula del Coste del capital propio es la siguiente:
Coste del capital propio = Dividendos por acción para el próximo año / Precio actual de la acción + Tasa de crecimiento de los dividendos
Una vez más, la fórmula del coste de los fondos propios tiene varios componentes que es importante determinar:
Dividendos por acción para el próximo año
El dividendo por acción para el año siguiente es una información que suele aparecer en los informes financieros de una empresa. Esto se debe a que las empresas suelen anunciar con antelación los dividendos que pagarán al año siguiente. Si esta información no está disponible cuando calcule su Coste del capital propio, puede hacer una previsión basada en los datos históricos de la empresa.
Precio actual de la acción
Aquí no hay ningún misterio, ya que todo lo que tienes que hacer es seleccionar el precio actual de las acciones de la empresa que estás estudiando. Esta información es muy fácil de encontrar en Bloomberg o Reuters si se trata de una empresa.
Tasa de crecimiento de los dividendos
Para este componente del Coste de los fondos propios, debe introducirse la tasa histórica de crecimiento de los dividendos de la empresa. Es poco probable que el porcentaje de cambio aparezca directamente en los estados financieros de una empresa. Sin embargo, se puede calcular de forma muy sencilla realizando una simple tasa de cambio entre los dividendos del año n y los dividendos del año n-1.
La importancia del coste del capital propio
A estas alturas del artículo, ya tienes todos los conocimientos necesarios para calcular con precisión el Coste del Capital Propio. Pero, ¿sabe por qué necesita calcularlo? ¿No? No se preocupe, a continuación encontrará una lista no exhaustiva de los usos que se le pueden dar al Coste del capital propio:
- El Coste del capital propio es un componente del WACC: el coste de los fondos propios es un indicador financiero que, al igual que el coste de la deuda, forma parte integrante de la fórmula del WACC (coste medio ponderado del capital). Volveremos sobre el concepto de WACC con más detalle en el próximo capítulo.
- El Coste del capital propio se utiliza para descontar el FCFE de una empresa: el Coste del capital propio es el tipo que debe utilizarse al descontar el Free Cash Flow to Equity de una empresa. Como recordatorio, el flujo de caja libre a capital es un flujo de caja que sólo remunera a los inversores de capital. El descuento es un proceso utilizado para determinar el valor actual de un flujo de caja que se recibirá en el futuro.
- El Coste del capital propio es un indicador de rentabilidad: no hay que olvidar que, antes de utilizarse en otras fórmulas (WACC y descuento), el coste de los fondos propios es ante todo un indicador financiero. Como ya se ha dicho, el Coste del capital propio es la tasa anual de rentabilidad para los inversores en los fondos propios de una empresa. Por consiguiente, es un importante factor de decisión a la hora de invertir en una empresa. Por ejemplo, creemos que es más sensato invertir en una empresa con un Coste del capital propio del 10% que en una empresa con un coste de los fondos propios de sólo el 5%.
Coste del capital propio vs. WACC
Como hemos mencionado en el capítulo anterior, el Coste del capital propio y el WACC son conceptos relacionados. De hecho, el coste de los fondos propios desempeña un papel fundamental en el cálculo del WACC.
El WACC es la tasa media anual de rentabilidad esperada por todos los inversores de una empresa. Como tal, el WACC ilustra la capacidad de una empresa para utilizar los fondos puestos a su disposición.
A título informativo, la fórmula del WACC es la siguiente:

Dónde:
- CoE = Coste del capital propio ;
- CoD = Coste de la deuda ;
- 1-Impuesto = Escudo Fiscal ;
- Estructura de capital = Fondos propios + Deuda.
Si desea saber más sobre el WACC, puede leer nuestro artículo dedicado íntegramente a este concepto.
Coste del capital propio frente a rentabilidad de los fondos propios
El rendimiento de los fondos propios es un ratio financiero que mide la capacidad de una empresa o proyecto para generar beneficios a partir de los fondos propios aportados. Como puede imaginar, los conceptos de Coste del capital propio y rentabilidad de los fondos propios son muy similares.
En teoría, el coste de los fondos propios y el rendimiento de los fondos propios deberían ser lógicamente iguales. En la práctica, casi nunca son iguales. Por lo tanto, es importante comprender las siguientes relaciones:
- Cuando el Coste del capital propio es superior a la Rentabilidad de los Fondos Propios, podemos decir que la empresa está destruyendo valor.
- Cuando el Coste del capital propio es inferior a la Rentabilidad de los Fondos Propios, podemos decir que la empresa está creando valor.